Las cámaras de video han evolucionado enormemente desde que aparecieron en el mercado. Las primeras cámaras eran auténticas maletas o mochilas en las que tan solo iban el magnetoscopio, es decir, el dispositivo en el que iba la cinta y que se encargaba de registrar una cámara. Esa maleta (las primeras pesaban unos 8 Kg), se conectaba por cable físico a una cámara que podía pesar entre 4 y 5Kg más.

Actualmente, tenemos en el mercado cámaras de video que caben en un puño, y lo que es mejor, con una capacidad y calidad de grabación extraordinaria.

Si nos centramos en el mercado de cámaras de vídeo de segunda mano, podremos encontrar los siguientes tipos atendiendo al soporte de grabación:

1.- Cámara de video de segunda mano que funcionan con cintas VHS. Uno de los formatos más conocidos, aunque ahora más en desuso. Las cintas VHS reinaron paralelamente al sistema BETAMAX. Cintas de tamaño normal (unos 20cm de ancho) que permitieron el nacimiento de las primeras cámaras de video realmente portátiles y cómodas.

2.- Cámaras de video de segunda mano que funcionan con cintas VHS-C. Una variación de la anterior. Se trata de cintas VHS per de tamaño muy reducido, lo que colaboró a que las cámaras de video fueran aún más pequeñas.

3.- Cámaras de video de segunda mano que funcionan con cinta de Video 8 o Video Hi8. Un formato que SONY puso en marcha cuando vio que su formato BETAMAX no podía competir con el famoso VHS. Cintas pequeñas que permitían cámaras de tamaño mucho menor y, por tanto, más versátiles. Se entiende este momento como el instante en el que nació la verdadera portabilidad a nivel de usuario.

4.- Cámaras de video de segunda mano que funcionan con cinta mini DV. Un avance estratosférico, si bien no demasiado en tamaño de cámara, si en calidad de imagen, ya que el registro en esas cintas se realiza de forma digital.

5.- Cámaras de video de segunda mano que funcionan con tarjeta de memoria. Sin duda la era digital ha beneficiado al consumidor, al menos en ese aspecto. Al no tener que ubicar una cinta física, las cámaras digitales de soporte flash son de tamaños ridículos, con lo que su uso es fácil, cómodo y permite tomas anteriormente inaccesibles.

6.- Cámaras de video de segunda mano que funcionan con memoria interna. Idénticas a las anteriores, pero con una memoria o disco duro integrado en la propia cámara.

En el mercado de segunda mano llama la atención lo buscadas que están las cámaras de video de Video 8 y Video Hi8. La razón es obvia: los millones de usuarios que tienen cintas de este formato y que ahora desean pasarlas a digital necesitan usar estas cámaras como reproductor.

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