La relojería de lujo es un universo donde la precisión, el arte y la ingeniería se encuentran en una perfecta simbiosis. Dentro de este ámbito, existe un término: la fabricación in-house.

El bisel de un reloj es una pieza circular o anular que sujeta el cristal que protege la esfera. El bisel puede tener un mero papel estético, además de la función que acabamos de comentar, pero también otras funcionalidades. Dependiendo del reloj puede desempeñar una misión esencial. 

Es el único reloj de la historia que ha mantenido su modelo en el mercado durante más de 100 años. Un éxito de creación de algo tan perfecto y equilibrado que dura generaciones y por el cual hoy le dedicamos unas palabras de su historia.

Bien es sabido que los hombres son grandes coleccionistas de relojes de lujo, pero a las mujeres también les gustan. De hecho, el primer reloj de pulsera en 1810, fue diseñado para una mujer, Caroline Murat, reina de Nápoles. 

Rolex GMT Master es uno de los modelos más conocidos de la marca, creado en 1954 y llamado popularmente “Pepsi”, ya que sus admiradores decidieron ponerle dicho apodo por los colores contrastantes de su bisel Azul y Rojo relacionado con la famosa marca de bebida gaseosa.

Hoy queremos presentaros uno de los relojes de lujo que recientemente hemos incorporado a nuestro stock. Nos referimos al Breitling Navitimer B01 Chonograph 46mm. 

Si te has preguntado qué es lo que tiene el Omega Speedmaster Professional o el Breitling Navitimer Cosmonaute que no tenga un Omega Constellation o un Breitling Superocean estás en el lugar correcto. 

Con tan sólo nombrar Omega Seamaster se nos viene a la mente “el reloj de James Bond” pero la realidad es que este legendario reloj no fue parte de la película hasta 1995, donde Pierce Brosnan usa su Omega Seamaster Professional Diver 300m Quartz como arma de láser y detonador de minas, pero la historia de este reloj se remonta a varias décadas atrás.

Invertir o no en un reloj de lujo quizás pueda parecer un tema algo controversial. Si analizamos el término como tal nos puede transmitir la imagen errada de un perfil comerciante que no siente pasión alguna por la horología. Sin embargo, no es necesario recalcar que los relojes de lujo son, en efecto, un producto muy valioso y que dicho valor puede aumentar drásticamente con el tiempo.  Claro que nadie puede predecir el futuro de aquellos relojes que deseas adquirir y aunque puede que este no sea tu objetivo principal, velar por el mismo es un acto bastante responsable.