El mantenimiento, limpieza y puesta a punto periódica, no solo garantizan que la cámara esté a punto cuando la necesitamos, sino que perdure en el tiempo mucho más años.
No hemos de caer en el error de pensar que nuestra cámara digital réflex de segunda mano queda protegida totalmente manteniéndola en su bolsa de transporte.

Una cámara que esté guardada permanentemente en una bolsa de transporte, aunque esta sea especial para fotografía, puede acumular humedad. Si la humedad entra en la cámara, hemos de recordar que difícilmente saldrá de la bolsa si esta no respira.

Para salvar lo anterior, recomendamos por una parte tener la bolsa abierta cuando no usamos la cámara; por otra parte podemos introducir una bolsita clásica antihumedad de las que vienen con estos productos cuando son nuevos. Si no disponemos de ellas, bastará con colocar unos granos de arroz en una bolsita de ropa o textil.

Es importante igualmente tener en cuenta la distribución de los accesorios de la cámara en la bolsa. Todos los elementos deben estar aislados del resto a través de almohadillas protectoras. Cualquier golpe, provoca una reacción en cadena que afecta a los elementos que estén en la bolsa en contacto físico.

Evita colocar monedas, llaves o elementos que pudieran estropear tu cámara u objetivos.

Finalmente, recomendamos no desmontar los objetivos si no es absolutamente necesario. Cada vez que desmontamos un objetivo, corremos el peligro de que entre polvo o partículas en el interior de la cámara.

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Pere

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