En este artículo os explicamos cómo comprobar si el sistema AF o autofoco de un objetivo fotográfico profesional funciona correctamente y no tiene ningún tipo de desajuste. Estas comprobaciones deben realizarse de una sola vez, sin cambios en la luminosidad ambiental.

¿QUÉ DEBEMOS HACER?

Dado que hablamos de precisión y de profundidad de campo, trabajaremos con modelos muy pequeños, por ejemplo valdrán unas pilas como las que puedes ver en la fotografía. Dispondremos los diferentes elementos uno al lado del otros y distanciándolos en profundidad de forma muy sutil. Hablamos de unos milímetros entre uno y el siguiente.

Obviamente el efecto que buscamos y la separación, dependerá de la distancia focal del objetivo que estamos comprobando y de la abertura máxima del diafragma.

NOTA: recomendamos una separación de unos 10mm entre todos los elementos. Recordad, cuando hablamos de separación nos referimos a profundidad, no a lateralidad.

La prueba consiste en disparar con la cámara sobre la mesa. Haremos 4 fotografías. La diferencia entre ellas será el lugar donde enfocamos, y lo haremos de este modo:

1.- Situaremos la cámara frente al primer objeto de la izquierda y con el autofoco central activado, enfocaremos y dispararemos.

2.- Correremos la cámara hacia la derecha para situar el segundo objeto frente a la misma. Enfocaremos ese objeto en foco automático y dispararemos.

3.- Correremos la cámara en paralelo hacia la derecha y haremos lo anterior con el tercer objeto.

4.- Haremos lo anterior con el cuarto objeto.

Es muy importante que cuando corramos la cámara hacia la derecha, lo hagamos en riguroso paralelo. Para ello recomendamos dibujar una línea en la mesa o adherir una cinta adhesiva para tener una referencia exacta.

Una vez hechas las fotografías, procederemos a visionarlas en pantalla de ordenador. Lo que hemos de ver en estas fotografías es que para cada una de ellas está perfectamente enfocado el elementos en cuestión y completamente desenfocados los elementos restantes.

Por ejemplo, observando la segunda fotografía (segundo elemento enfocado) el foco debe ceñirse a ese segundo elemento dejando completamente desenfocado el resto de elementos. Si por un casual en este ejemplo viéramos que el foco se desplaza hacia el primero objeto, tenemos un problema de "front focus"; si por el contrario el foco se desplazara hacia el elemento posterior, tendríamos un problema de "back focus".

Con esto se pretende saber si las lentes de nuestra óptica están bien centradas e intactas. Pudiera ser sin embargo, que el problema estuviera en el sensor, y que el plano focal real no coincidiera con el mismo. Hablaremos de cómo realizar esta comprobación en un post posterior.

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David

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